Con las botas puestas…

Koldo Aldai Jubilarnos, sí, cuando la arboleda semeje larga, cuando las rodillas se doblen y no aguanten el cuerpo; cuando aporreemos el teclado con dedos temblorosos; cuando no distingamos las teclas, las ideas, cuando las frases se nublen y el horizonte nos abrace. Jubilarnos, sí, cuando el aliento falle y el viento nos tumbe. Jubilarnos … Leer más